El aumento del estrés en el embarazo es más frecuente de lo que se cree. Esta etapa puede albergar numerosos cambios a nivel hormonal que modifiquen al completo tu calidad de vida. También, los nervios por la llegada del bebé pueden contribuir al exceso de nerviosismo y la aparición de ansiedad u otros cuadros psíquicos. Pero nosotras sabemos que existen también técnicas y terapias que pueden contribuir a la relajación de nuestro organismo.
Técnicas de relajación para el embarazo
Nosotras sabemos que esta situación es más frecuente de lo que pensamos. Es común desesperar en determinados momentos, pero la clave es conectar nuestra mente con nuestro cuerpo y escuchar lo que necesita en ese instante. Existen numerosas técnicas para relajarnos durante esos momentos de máximo estrés en esta etapa. Te recomendamos ponerlas en práctica.
Primero, puedes tomar un par de minutos para respirar profundamente y estirarte suavemente durante un día agitado. Podemos hacer estos tres estiramientos, manteniendo cada uno por al menos 20 segundos.
Abdominales y estiramiento lateral
Siéntate cerca del borde delantero de una silla. Alarga los brazos por encima. Ahora estírate a través de tu mano derecha, alargando más el lado derecho de tu cuerpo mientras presionas con el talón izquierdo. Cambia de manos y repite al otro lado.
Estiramiento del cuello
Siéntate cerca del borde delantero de tu silla. Levanta los hombros hacia arriba y presiona hacia abajo. Repite algunas veces. Luego gíralos hacia adelante, arriba, atrás y luego hacia abajo. Repite algunas veces. Gira la cabeza lo más a la derecha posible. Repite a la izquierda. Ahora, inclina la cabeza hacia la derecha y luego repite hacia la izquierda. Finalmente, inclina la barbilla hacia abajo.
Estiramiento de la espalda
Siéntate hacia adelante en tu silla con las piernas un poco más anchas que las caderas. Inclínate hacia adelante desde las caderas y baja el torso hacia abajo para que tu cabeza descanse entre los muslos. Deja que tu cabeza y brazos cuelguen hacia el suelo.
Meditación en embarazo
También puede ser necesaria la meditación para ayudarte:
Ponte en una posición cómoda, ya sea sentada o acostada de lado. Tensa un área de tu cuerpo durante 2-3 segundos y luego relájala. Mueve desde los dedos de los pies hasta la cara, tensando y relajando cada área. Procura poner la mente en blanco.
Los ejercicios de respiración también pueden ayudarte a relajarte. Visualizar un parto fácil y suave puede ser muy tranquilizador y relajante cuando surge esa ansiedad.
Por otro lado, si debes hacer varias tareas pero los nervios te lo impiden, toma un lápiz y escribe una lista de las tareas más importantes que debes realizar. Permanece relajada y crea una estrategia clara sobre cómo completar todas esas tareas pendientes.
Recuerda que en sí el estrés en embarazo es malo para tu salud mental y física. Algunos estudios han encontrado que los niveles elevados de cortisol materno (la hormona del estrés) pueden provocar embarazos más cortos y posiblemente afectar el desarrollo del bebé. Por eso, te animamos a llevar a cabo las anteriores recomendaciones para tu tranquilidad y relax.